Buscando un título 12

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Dicen eso de “año nuevo, vida nueva”, pero esto es demasiado, hoy me he levantado y todo ha cambiado, y cuando digo todo es todo. Ayer me acosté siendo un alto hombre de 23 años, con la carrera de psicología recién acabada, con una novia preciosa que me quería, con una madre que me sobreprotegía y un padre que pese a que me quería estaba tantas horas trabajando que casi ni aparecía por casa. Ayer tenía el pelo castaño, unos enormes ojos negros y la nariz torcida, era capaz de hablar en portugués e inglés, me había masturbado dos veces dándole a mi pene de 17 centímetros un placer que todavía al recordarlo hace que se me pongan los pelos de punta.

Hoy soy una mujer, madre de un niño y una niña de 5 y 12 años respectivamente, sé cocinar y aunque actualmente no estoy trabajando, le he preparado el almuerzo y el desayuno a mis dos hijos, tengo 42 años... mi marido 48. No recuerdo ninguna palabra en portugués, ni mucho menos en inglés, hablo y escribo a la perfección el español. Tengo el pelo largo, teñido de rubio, ojos marrones y nariz chata, me duelen los huesos de la mano derecha y la espalda, espero que se me pase, pero es sumamente incómodo y todo parece indicar que como no me cuide, ese dolor estará conmigo durante mucho tiempo. Tengo unos pechos caídos, y ahora me apetecería tener sexo… con un hombre joven de unos 23 años, alto de pelo castaño, con enormes ojos negros y una enorme y dura polla...